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miércoles, 11 de junio de 2014

Helado de la alegría


Ingredientes

  • Un grano de sonrisa de unicornio
  • Un pellizco de arco iris
  • Un vaso de leche de panda
  • Tres cucharadas de chocolate en polvo
  • Un vaso de agua mágica
  • Un trozo de mantequilla de hadas
  • Un pellizco de azúcar negra
  • Un chorrito de aceite
  • Una taza de yogur
  • Crema de león
  • Pestañas de azúcar de unicornio

Preparación

Cogemos un bol y mezclamos el yogur y las sonrisas de unicornio, después le añadimos el pellizco de arco iris y la leche de panda. Lo batimos todo muy bien y saldrá una masa muy espesa, así que mezclamos la masa con aceite, agua mágica y con la mantequilla de hadas. Cuando tenemos la masa la enfriamos en el frigorífico. Después cogemos una olla y metemos el chocolate en polvo y la crema de león y eso es lo que le dará sabor y color a nuestro helado. Sacamos la masa del frigorífico y mezclamos la masa y el chocolate lo movemos y ya tenemos nuestro helado.


Degustación


Es un postre para tomar entre amigos, con este helado estarás alegre, lo puedes tomar en un cucurucho, pero este helado se toma mejor en un bol pequeño y cuando este todo servido le añadimos las pestañas de unicornio para que dé más sabor y a ¡comer! 

miércoles, 27 de noviembre de 2013

El koala y el unicornio mágico

Eran dos niños llamados Peter y Marco. Un día sus padres los llevaron al zoo. Ellos eran muy traviesos y al llegar al zoo se escaparon de sus padres. Después de tirarles piedras a varios animales fueron a la zona de los koalas y se dedicaron a tirarles piedras y toda la basura que se encontraron en el camino.

El koala les dijo: 

-¿Por qué estáis tirando cosas a los animales? Lo que estáis haciendo lo pagaréis. Los niños se quedaron tan sorprendidos al ver que el koala hablaba que en seguida empezaron a reírse.

-¡Ja,Ja,Ja! Un koala que habla -dijo Marco.

Peter, mirando al cielo, añadió:

-Y un burro que vuela.

Continuaron riéndose, pero el burro era el unicornio mágico.

-Por reíros de mis amigos los animales el resto del día sufriréis como nosotros -dijo el unicornio mágico.

-¿Y qué va a hacer un burro?-rieron Peter y Marco.
De repente una nube de polvo los envolvió convirtiéndolos en hienas.

Después de un día riéndose como las hienas, aburridos de los visitantes y maltratados por las venganzas de los animales, Peter y Marco suplicaron al unicornio que los convirtiera otra vez en niños. El unicornio los perdonó y ellos volvieron con sus padres.

María Plaza, 1º A

jueves, 21 de noviembre de 2013

Infancia, de María Plaza


Polvorones de Navidad. Caída de la cama. Cromos de las Monster High. Tarta de cumpleaños de mi madre y mi vecina. Vamos a la cama que hay que descansar. Veranos con mi prima. Un dos tres pollito inglés. Que sueñes con los angelitos. De oca y tiro porque me toca. Cómete las lentejas o las tienes para merendar. Bocadillo de jamón y aceite. Tardes con películas de Barbie. Vestidos de flores de mi madre. ¿Mamá, cuándo nos vamos al pueblo?